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jueves, 29 de noviembre de 2012

Anuncios que Usé y que Usaré

 
Hoy vengo por aquí a enseñaros los anuncios que alguna vez he usado para mis relatos y los que voy a usar también.

Empezamos primero con los que he usado:

(El Chico de Ojos Azules)
 
(Una Noche Mágica)
 
(Las Rosas, El Beso y El Amor)
 
(Las Rosas y El Olor)
 
Y ahora los que pienso usar para próximos relatos:
 
 

 
 
 


Si encuentro más anuncios se los pondre por aquí. Pero, ¿qué les parecen los anuncios que he usado? Y de los que usaré ¿qué piensan?

viernes, 23 de noviembre de 2012

Moraleja


Entre en aquella pequeña biblioteca donde el amor flotaba en el aire como si se tratase del oxigeno que la gente respiraba.

Allí encontré a un joven leyendo un libro que ya había leído un par de veces sentado en un butacón muy atento a la lectura, ya que no prestaba atención a lo que pasaba a su alrededor, pero que de vez en cuando cogía un termo de café y la daba unos cuantos sorbos. Luego vi a una joven sentada en una mesa estudiando pero en vez de estar concentrada miraba como el joven leía.

Me acerque a una estantería y mire los libros sin prestarles mucha atención, quería ver que hacia la joven y también que hacia él.

Cuando llevaba ya un rato allí la joven se levanto con todo desilusionada porque el joven lector no le había hecho caso. Ella haciendo ademan de torpeza se dio contra el butacón donde él estaba sentado y todos los libros le cayeron encima del.

-                Lo siento mucho. Soy muy torpe - ella se disculpaba mientras recogía todo.

-                 No pasa nada, ya había terminado el libro y me iba a levantar. Así que te perdono - sonrió y ayudo a la joven a recoger lo que tenia encima y lo que había caído al suelo.

-                No tienes que ayudarme. Puedo sola - ella no podía estar más nerviosa, el corazón le latía a mil por hora y sus piernas temblaban.

-                Ínsito - dijo él y continúo ayudando  a la joven.

En un momento dado ambos cogieron la misma hoja, se miraron a los ojos y después de unos segundos así el le devolvió la hoja.

Si en aquel momento se hubieran besado habría sido un bonito recuerdo.

Siguieron recogiendo hasta terminar con todo. Ella le dio las gracias y él lo único que hizo fue mirar como la joven se marchaba feliz.

Y el amor que se había notado en el aire cuando había entrado se había marchado con la joven.

Moraleja: Así que el amor no siempre triunfa, no siempre salen las cosas cono uno quiere. Así que ya veis, aunque algo no salga como tú quieres a la primera debes intentar que te salga las veces que haga falta.



miércoles, 7 de noviembre de 2012

Besos Gloriosos


Levaba toda la noche detrás de él, ya que él había estado ligando con cualquier otra chica antes que con ella. Así que cuando tuvo la oportunidad, le agarró del brazo y se lo llevó a una sala contigua a donde se celebraba la fiesta.

Él no entendía nada, estaba mirando como su amiga le agarraba del brazo y se lo llevaba con él a otro lado. Cuando ambos entraron en la habitación, ella cerró la puerta para que nadie pudiera molestarles. Ella se fue acercando a él con paso ligero y sobre todo decidido.

-                ¿Qué haces? – preguntó él mientras caminaba hacia atrás asustado.

-                Lo que debía haber hecho hace tiempo, contarte la verdad – aquello aún hizo que él siguiera caminando hacia atrás – no muerdo ni nada.

Cansado paró de caminar hacia atrás, ella decidida le cogió el brazo, hizo que sus cuerpos se rozaran, luego ella le agarró por la chaqueta, se puso de puntillas y le besó, ambos cerraron los ojos mientras se besaban, primero la nariz de ambos se tocaron y luego lo hicieron los labios, se fundieron en uno solo, parecía que ninguno quería dejar de besar a la otra persona. Cuando terminaron de besarse se miraron, ella lo hizo cohibida mientras que él sonrió, fue una sonrisa amable y de cariño, compasiva y sobre todo de ternura.

-                ¿No estarás mal conmigo? – preguntó ella haciendo que él bajara de las nubes.

-                No, al contrario, no sabía que sentirías eso por mí y me he dado cuenta cuando me has besado que me gustado el beso – aquello sorprendió a la joven, su amigo se acercó a ella, le agarró por los pómulos de las mejillas y volvió a besarla – ahora me he dado cuenta de que tus labios son los mejores que he probado en mi vida. Eres especial.

-                Y tú para mí – desde ese momento ambos empezaron a salir y desde el día que empezaron a salir no lo han dejado y hoy están casados y tienen tres maravillosos hijos a los que ambos quieren. El destino hizo que se unieran y eso hicieron ambos, unirse hasta formar la familia que hoy son.             

jueves, 1 de noviembre de 2012

La Manzana y La Habitación de Hotel


Se encontraban ya en el hotel descansando un poco, el vuelo había sido agotador, habían estado 6 horas metidos en el avión y lo único que querían era descansar para poder salir a cenar y después pasear.

-          ¿A dónde quieres ir? - le pregunto él a Holly.

-         A donde me lleves tu, que no conozco la ciudad salvo por las fotos y las películas - Holly se acostó en cama y noto como el mullido colchón le incitaba a dormir.

-         Te sorprenderé - el se acostó al lado de Holly, contemplo como ella se iba acercando a él para besarle.

Ella le toco la cara mientras el contemplaba los movimientos tan gráciles de Holly. Fue desabrochando la camisa que el poseía, necesitaba contemplar su pecho. Cuando estuvo sin camiseta, ella se quito la suya. Luego el comenzó a besar el cuello de Holly, ella se ruborizo de la emoción. Si llegaban al final sería la primera vez que lo harían entre ellos. Le costó, pero al final consiguió quitarle el sujetador. Se contemplaron, el se quito con rapidez el pantalón al igual que ella. Ella toco el pecho de él y llego con sus manos a la cara donde la acerco para que los labios de ambos se besaran, se fundieran en un beso cálido y profundo.

-         Te Quiero - el comento y ella sonrió.

-          Yo también Te Quiero - y al decir eso continuaron besándose.

El marco el recorrido de besos desde los pies a la boca pasando por la braga que cubría la zona intima femenina, luego paso por los pechos tan perfectos que ella poseía. Cuando llego a la boca se paro, mientras se besaban él le quito la braga y ella a él el calzoncillo. Ahora estaban desnudos bajo las sabanas de aquella habitación de hotel. Se miraron a los ojos, luego ella miro abajo y encontró el órgano de reproducción masculina que la tenia, jugueteo un poco con él, hasta que él se puso encima de ella y se lo metió hasta el fondo, haciendo que gritara de placer. Cuando terminaron ambos estaban exhaustos, se miraron y sonrieron.

-         Tengo hambre - Holly dijo para romper el hielo.

-          Ahora te doy algo - cogió la bolsa que había cerca de él en el suelo y de ella saco una manzana - aquí tienes algo para comer.

-         ¿Manzana? Siempre me das lo mismo - ella le miro como cansada.

-         Es que no tengo otra cosa y me parece lo más sano que veo. Así recuperas liquido y también así se te pasa el hambre - ella dejo de cabrearse y le beso.

El móvil del sonó, era su jefe. Se puso el calzoncillo y camino por la habitación, hablaba en un perfecto y cuidado ingles. Ella le contemplo sentada en la cama con las sabanas tapándola.

-         Como usted diga jefe, hasta esta noche - al escuchar aquello ella se desilusiono, pensó que irían a cenar juntos, pero al final no era así - a las 8 estaré allí.

-          Entonces nosotros no saldremos - él le negó con la cabeza y le beso, notando las lagrimas de Holly en sus mejillas - bueno, espero tenerte mañana por lo menos para desayunar. Ahora arréglate o llegaras tarde a donde tu jefe te ha dicho.

-          No estés triste, si te he compensado haciéndolo y te compensare cuando no  tenga trabajo - le beso en la frente y fue al baño a darse una ducha rápida.

Se arreglo rápido, no sabía cómo sería el tráfico a esa hora y quería ser puntual. Se despido de Holly con un beso en el aire y con un Te Quiero.

Y allí se quedo Holly, en la cama sentada tapada por las sabanas con la manzana en la mano llorando por encontrarse sola en una ciudad que no conocía.